viernes, 10 de abril de 2009

A Firenze en auto, Diciembre 2003

Uno de los primeros viajes que hicimos con Cristina fue cuando recién pololeabamos. Ella me fue a ver a Niza y para hacer "turismo aventura" arrendé un auto que nos llevara de Niza a Firenze (Florencia), sin siquiera saber qué ruta debía tomar. Fue en ese entonces cuando descubrí al gran Mappy y sus itinerarios detallados (avisa en qué kilómetro uno debe doblar incluso), en nuestro caso, nos mostraba esto:



Pan comido! (pensamos), cargamos maletas en el yaris sport arrendado, tomamos rumbo este y aceleramos. Lo primero que nos llamó la atención fue la apertura de las fronteras: de pronto los carteles azules eran verdes, los verdes azules y todo estaba en italiano.

Para pasear un poco, tomamos un descanso para conocer Genoa (Génova), así que seguimos los carteles y en este puente doblamos a la derecha:


Un poco decepcionante la visita, porque llegamos justo al barrio "normal" de Génova, ciudad portuaria antigua y un poco sucia (en rigor nos equivocamos de barrio, simplemente):


Seguimos hacia la bella Toscana no sin antes perdernos en las 200 vueltas que tenía ese puente para retomar la ruta. En el camino notamos que varios caminos apuntaban a USCITA, que grande debe ser esa ciudad, pensamos, ¿cómo no la oímos nombrar antes? ... (USCITA = salida, de la autopista en este caso). Pasamos (literalmente) por Pisa y en un trebol gigante (que les encantan a estos tanos, debe ser para perder turistas y que los perdidos se queden a vivir ahí) encontramos la ruta a Firenze. No fue fácil puesto que la mayoría de los carteles en Italia son como el siguiente:



Luego de entrar a la ciudad enfilamos hacia el centro (al lado de la estación de trenes de Santa Maria Novella), llegamos a nuestro hotel notando que en el casco antiguo de la ciudad NO HAY ESTACIONAMIENTOS, por suerte un hostal amigo nos arrendó uno. Salimos a dar una vuelta, volvimos y dormimos del cansancio.

A la mañana siguiente, al desayuno nos preguntaron si habíamos dormido bien, nuestra respuesta (en un italiano-mapudungún) fue que no habíamos podido dormir por el "timbre"
- "el qué?" nos preguntó el recepcionista
- "la campana" dijimos nosotros, porque sonaba a cada rato cerca de nuestra pieza
- "¿il campanello?" dijo el recepcionista
- "SI, EL CAMPANELO!" dijimos nosotros
- "non abbiamo un campanello", dijo el recepcionista, justo cuando sonaba un estruendoso RIIIING!, entonces nos miró y nos dijo "oh sì, che il nostro campanello, mi dispiace" (ah si, ese es nuestro timbre, perdón), y nos cambió de pieza.

Salimos a pasear los dos días siguientes y recorrimos lo típico de la ciudad: El Duomo, El Palazzo Vecchio y el Ponte Vecchio.














Llegado el momento de volver y pagar los extras, nuestro super hotel 3 estrellas rechazó mi tarjeta de crédito porque no la conocía (???) y al pasarle otra (la francesa) el recepcionista dijo "no pasa, no pasa" haciendo como que usaba la máquina, pero ésta la tenía sin la línea telefónica porque la acababa de sacar para usar el teléfono. Pensando que nosotros eramos h... tontos, insistió a que fueramos al cajero automático y pagáramos en efectivo. Como no había cajero cerca yo le insistía que el hotel ya estaba pagado (via internet) y que no le íbamos a pagar ni un Euro por los extras por chanta. Al final, como ya la estábamos viendo verde Cristina llamó a un amigo quien amablemente nos envió su número de visa por FAX (esos son amigos!) y el recepcionista cargó todo a ese número, mientras yo hacía los trámites para que reversaran el cobro del hotel de mi tarjeta de crédito... eso si es turismo aventura!.

A la vuelta pensabamos pasar por Pisa, pero en vez de salir a las 11 AM ya eran las 3 PM, así que salimos de Firenze rumbo a Niza directo. Pero en el camino vimos un cartel de supermercados Carrefour y partimos en esa dirección llevados por el hambre. Craso error: el Carrefour estaba en un pueblo perdido que nos tomó 1 hora encontrar ya que a 10 km de seguir los carteles de Carrefour, éstos desaparecieron y no sabíamos si seguir y devolvernos. Finalmente compramos (si, mi tarjeta de crédito funcionó !!!), retornamos a la autopista (gracias a un par de viejitos italianos que se puso a pelear por nuestra culpa), y volvimos a casa.

Arrivederci!

2 comentarios:

  1. hola! gracias por los datos!!! con una amiga queremos arrendar un auto en niza y hacer la costa azul hasta florencia....me recomiendas arrendar el auto por internet?? sabes algun sitio en especial??

    ResponderEliminar
  2. Hola Isabel

    Nosotros "siempre" (como 5 veces en 3 años) arrendamos en europcar, tenía la mejor relación precio/beneficio. Eso si, antes de entregarlo, llenen el tanque ;)

    En todo caso, el 2006 hice el viaje con amigos desde Niza por tren y el stress de no manejar por el centro de Florencia lo vale (y salía como 13€ el pasaje)

    ResponderEliminar